Wednesday, January 28, 2009

- Catarsis -

Lloró por todo lo que no había llorado, por todo lo que se había guardado; por todas las veces que le tembló la pera y se le envidriaron los ojos; por las veces que salió corriendo y las que se retó en el espejo. Lo hizo, sin remordimientos y no lo disfrazó; no culpo al final de una película, ni a una melodía melosa. Esta vez aceptó que se sentía mal y no pudo encontrar nada para soslayarlo.

Luego de una catarsis tipo carta, a su pasado sin clausura y de la que más tarde se arrepentiría, apagó la luz y el ruido de su pieza, que en realidad era compañía o quizá, la frontera que no le permitía caer, ni entregarse. Entonces, cuando ya no había luz que interpelara, ni ruidos que apagaran sus impulsos… se mintió, pues cerró los ojos con forzadas ganas de dormir. Sin embargo, esta vez, tuvo la necesidad de aferrarse a su cojín, ése que le habían hecho llegar en un tiempo en que nadie más podía estar presente, ése que se convirtió en su cobija, una mantita tipo Linus, con poderes mágicos de protección y seguridad. Fue ahí, que la pera congelada, volvió a tiritar y sus ojos aunque no se veían, se sentían de vidrio y luego de agua. En esta oportunidad no pudo, ni quiso escapar, porque no había quien mirara o escuchara y tampoco, había de quién sentir vergüenza o quien pudiese hacer un reproche. Esta vez, abrazar su cojín le permitió botar todo lo que hace tanto no se había podido ¿o permitido? ya daba lo mismo…


Lloró y no le dio vergüenza, porque mientras lo hacía, llegaba el alivio y la limpieza, porque ya no había nadie a quién culpar y sobre todo, porque no había nada ya que perder…




P.-


Wednesday, January 21, 2009

- Un Raconto en 100 Palabras -





…Hoy pasé por aquel lugar que era nuestro de lunes a viernes, recordé tus ojos mirando mi rostro sonrojado, recordé en donde aprendí que eran las mariposas, que el mundo puede estar ajeno y que la gente se aglomere no necesariamente es malo, si lo único que quieres es dejar de esperar que las miradas que sonrojan, se conviertan en besos de confesión. Aún recuerdo tu mirada y mi rubor, aún después de todos estos años, espero que alguno de los dos se atreva a algo que jamás sucedió y del que sólo queda el lugar que nosotros hacíamos especial...



P.-

Sunday, January 18, 2009

- Hoy no quiero hablar -






Hoy No quiero hablar…

Hoy quiero que aparezcas de la nada, mientras yo miro descuidada mi reflejo en el espejo.

Quiero que sin alcanzar a reaccionar tu mano ya esté suavemente subiendo por mi espalda, y mientras lo hace, sentir aquella corriente que nace a ras del piso y muere en un suspiro que cree pronunciar tu nombre...

Quiero que mi piel adolezca tu llegada, que ya no sea la misma quieta mar, si no que ahora quiera romper rocas y voltear navíos.

Quiero que pasen segundos en los que yo me pierda, para que en seguida, me traigas de vuelta, de un movimiento rudo y certero en la curva de mi cintura, con aquella otra mano que creía perdida.

Quiero sentir tu aliento, sí, tu aliento en mi cuello, que susurre algo que no entiendo y menos me importa, sólo me interesará sentir que hay vida en mí y que tú produces esa sensación, que me invade, haciéndome desear que me atrapes, que me atrapes, sí, que me atrapes.

Quiero que vuele todo y se difumine todo; que mis manos se fundan en ti y las tuyas me hagan perderme… Quiero perderme y regresar, ir y volver, como pequeños flashbacks en que ya no sabes cuál es el momento original.

Hoy No quiero hablar…

Quiero perderme en el reflejo de los dos y en el sonido de nuestro lenguaje sin palabras, en las señas que sólo tú puedes armar…por que, definitivamente, hoy no quiero hablar…



P.-