"Tiempo"

Querido Fernando,

Contandote que es de mí...

...Hoy me atreví a mirar mi espejo, pero mirarlo de verdad, en él vi mi rostro ya ajado, un tanto derretido, lleno de lineas que cuentan un poco el pasar de mi vida, esa vida que compartí casi por completo contigo ¿y qué vi? Vi que ya no soy lo que fui, ya no soy aquella que llegaba a una habitación y la ilumina con su presencia, como tú decías que yo lo hacía, mis comentarios ya no son tan agudamente graciosos, ni mis palabras tan atinadas. Creo que estoy pasada de moda, me lo dijo Panchita, la hija de Felipe, bueno en realidad me dijo que mis palabras lo están. Ella es una de las pocas personas que están de verdad. Creo que le agrada escucharme, le gusta que le cuente cómo tú y yo nos conocimos, cuan pavo era su papá cuando era un niño o qué pasó el día que ella nació.

Viejo, me siento sola y cuanto ha cambiado el concepto de SOLEDAD, pues sólo la empezaba a conocer, cuando llegaste tú, y creo haberla sentido rondar en alguna que otra crisis que pasamos juntos, pero era distinta, era dual; era silencio melancólico y a la vez era paz, ahora, es un hoyo negro al que le temo inmensamente, temo terminar como una viejita loca que cuenta lo mismo una y otra vez, a no poder valeme por mí misma, eso es a lo que más temo. No, me niego a ser el bulto con el que nadie quiere cargar, a ser la vieja loca que se pierde o la vieja lerda que no se para.


Cuando más te extraño es cuando me doy cuenta que estoy muy joven para no darme cuenta y muy vieja para conseguirme otro pirilacho, como tú les decías, aún me río de tus cosas y ya no estás hace tanto tiempo, quizá debería hacerme una cirugía y ser eternamente joven como esas niñas de la tele, pero para qué, ya no me quedan energías para andar conociendo a nadie, quisiera ya estar contigo...donde quiera que estés.



Creo que debimos tener una hija, las niñas siempre te quieren y jamás te abandonan, decía mi madre, no es que Felipe me haya abandonado, es sólo que parece que le estorbo a Paula, su esposa, y al final ella es la dueña de casa. No sé...tal vez sea sólo que hoy lo veo todo negro, porque es este día cuando más te extraño.


Mañana, puede que esté más alegre, iré a casa de Denisse, me vendrán buscar ¿Puedes creer que tiene otro viejo ahora? Me lo va a presentar, yo no sé de dónde los saca, de sus multiples actividades, me cuenta siempre. Me ha ofrecido ir a tomar clases de baile y nunca le digo que sí ¿Y si ahora voy y ya? Sí, eso haré voy a comenzar a acompañarla y ¡se acabó la lesera! quiero pasarla bien antes de partir a acompañarte, mientras tanto ámame como siempre me dijiste que lo hiciste, que yo aún lo hago a través de cada recuerdo que aún me permite guardar mi memoria ya frágil...

Tu Viejita.-